Hoy en Cataluña se celebra la Diada, nosotros desde aquí también lo hemos querido celebrar. Llevábamos unos días planificándolo, fuimos a comprar la carne y el mismo día las bebidas fresquitas. Yo tenía planeado hacer una coca en recapte (torta muy fina con cebolla y pimiento),
un pan de payés y una coca de pan y azúcar para acompañar el plato principal BARBACOA, todos nos moríamos de ganas de estrenarnos en lo de parrillear en el jardín común, jijiji.
La noche antes casi se me olvida cortar la cebolla para matarla (ponerla en agua y sal para que pierda ese sabor tan fuerte y de paso pierda agua, para que no estropee la masa), ¡que pestazo toda la casa! y eso que la dejé toda la noche en la terraza y las cascaras dentro de tres bolsas cerradas por individual...
Empecé el día preparando masas, primero la de la coca, después la del pan y por último la de la coca dulce. Hubo un momento a media mañana que casi tiro la toalla, pues la coca de cebolla no quedó todo lo fina que debía quedar, el pan de payés acabo siendo tres barras de pan y a la coca de azúcar le faltaba el anís... un desastre.
Así que me fui a tomar un café al starbucks, a ver si así cambiaba mi suerte... Al final estaba todo muy bueno, y todos se rieron de mí al explicarles que lo había pasado tan mal.
RECETA COCA EN RECAPTE
INGREDIENTES:
Para la masa:
· 500 gr de harina de trigo
· 30 gr de levadura
· 1 vaso de agua
· 1 dl. AOVE
Para el relleno:
- 2 pimientos rojos escalibados
· 2 cebollas cortadas en juliana fina
· Pimentón rojo
· Sal y aceite de oliva.
ELABORACION
Para empezar, elaboraremos la masa de la coca. En un bol, mezclaremos los 500 gramos de harina tamizada (pasada por un colador fino) y la mezclaremos con la levadura, añadiendo poco después un vasito de agua templada. Amasaremos bien hasta que nos quede una masa suficientemente consistente. Taparemos con un trapo limpio y dejaremos reposar en una zona templada de la cocina durante unas 3 horas.
Pasadas las tres horas, añadiremos a la masa el aceite, amasaremos de nuevo y, cuando de nuevo tengamos una masa consistente, pero elástica, taparemos y dejaremos reposar 30 minutos más.
Mientras reposa la masa, aprovecharemos para “escalibar” los pimientos. Elegiremos dos pimientos rojos grandes, los lavaremos bien, secaremos con un trapo y les pondremos en una bandeja apta pera el horno. Echaremos por encima aceite y sal y taparemos la bandeja con papel de aluminio. Meteremos en el horno y dejaremos asar durante 20/30 minutos (dependiendo del grosor de los pimientos) a unos 200 grados. Pasado ese tiempo, envolveremos los pimientos en papel de periódico, al objeto de que “suden” y se nos pelen mejor.
Una vez templados los pimientos asados , los pelaremos, cortaremos en tiras y los dejaremos marinar con una pizca de sal y un buen chorro de aceite de oliva.
Una vez tengamos todos los ingredientes preparados: la cebolla cortada en juliana fina, el pimiento escalibado cortado a tiritas, pasaremos a espolvorear harina sobre la encimera de la cocina y a estirar la masa con un rodillo de amasar. La intención es estirar la masa para dejarla del grosor que más nos guste (yo soy partidaria de una masa lo suficientemente fina como para que aguante los ingredientes, pero que no sea demasiado gruesa –unos 3 mm una vez cocida), dándole una forma rectangular.
Sobre una bandeja de horno, pondremos una hoja de papel especial para horno y sobre ella colocaremos la masa estirada. Lo primero que haremos será echar por encima la cebolla en juliana, salpimentando ligeramente, espolvoreando con pimentón (yo utilizo una mezcla al 50% de pimentón dulce y picante) y echando un poquito de aceite. Seguidamente añadiremos el pimiento asado Regaremos todo el conjunto con un buen chorro de aceite de oliva virgen.
Introduciremos todo el conjunto en el horno a 180º durante 30 minutos.
Y ya está hecha.