Por la mañana tempranito empezamos nuestra nueva ruta hacia el Deadwood (Dakota del Sur) para después seguir hacia el Monte Rushmore. La ruta que nos marcó el GPS fue brutal, se que muchas veces he hablado de las vistas y los paisajes, pero esta vez fue increíble. Atravesamos el Bighorn National Forest, la carretera nos recordó a nuestras carreteras de Falset, estrechas y serpenteantes, la subida llegó a los cuatro mil metros, y como siempre: que pena que fuéramos con la hora pegada, porque de verdad, es para ir de acampada unos diítas...
Y por fin llegamos a Deadwood, que por muy bonitas que sean las vistas, todo cansa. Deadwood es un pueblo muy típico del Oeste americano, pero vamos que llevamos días viendo calles de este estilo, y aunque están muy bien conservadas y son muy llamativas... seguimos nuestra ruta hacia el Monte Rushmore.
Como siempre pagaremos una entrada, esta vez 11$ por coche. Muy bien montado, parquing subterráneo con ascensores, zona shooping, refrigerios, museo, baños... y asiáticos muchos asiáticos....
No voy a contaros la historia del monte Rushmore, aunque de verdad es interesante.
Animados por la experiencia tomamos la carretera hacia Crazy Horse. Aunque finalmente, aunque la historia es muy bonita, no entramos. Resulta que es una institución totalmente privada y para poder llevarse a cabo una de las maneras de mantenerse es con el pago de las entradas, cosa que a nosotros nos pareció un escándalo, nos pidieron 11$, bien, pero por persona, así que dimos media vuelta y seguimos nuestro camino. Dirección a Casper, donde tenemos el hotel reservado.
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